Última actualización septiembre 29, 2015
La realización del Mundial Brasil 2014 implicó mucho más que la construcción de los estadios y la organización en lo que respecta a lo deportivo. Uno de los grandes problemas que se tuvieron que solucionar fue el de la situación de las favelas. En Río de Janeiro se decidió reacondicionarlas para poder mejorar tanto la situación de las personas como la capacidad hotelera de la región para el evento mundialista.
De esta manera se las arregló para que puedieran recibir a turistas durante el mundial. Esta decisión se vio motivada a la escasa oferta hotelera que existe en la ciudad. Al haber una gran demanda el servicio se iba a ver colapsado por lo que se tuvo que buscar una alternativa.
Así es como los turistas pudieron hospedarse en las casas de las favelas, en donde sus residentes ofrecen el paraje por un precio muy inferior al de los hoteles, habiendo aproximadamente unos 400 dólares de diferencia (en los hoteles cobran la noche alrededor de 450 dólares, mientras que en las favelas van a cobrar cerca de 50). Por esta razón será tanto un beneficio para la ciudad como para los habitantes y fanáticos que arriben a ver el evento más esperado del año 2014.
