Última actualización octubre 5, 2015
Sin dudas que Lionel Messi es el capitán de la selección Argentina. Pero si de algo tampoco nadie duda, es que Javier Mascherano es el verdadero capitán y líder del conjunto albiceleste. Con su voz de mando, su templanza y su entrega en cada partido, se ha transformado en el verdadero símbolo de este equipo. Un guerrero con el que cualquiera quisiera contar.
Pese a que todos lo conocen, el encuentro de ayer frente a Holanda fue para Mascherano de gran reconocimiento. Desde el primer minuto se hizo eje del equipo, tanto en el corte como en la distribución del juego.
Alentando y ordenando a sus compañeros, se mostró como el líder en todo momento. Incluso, demostrando su coraje y su valentía, cuando cayó casi desplomado en la cancha, reponiéndose enseguida y queriendo seguir jugando pese al dolor. Sin olvidar por supuesto, ese quite brillante que tuvo frente a Robben en el final del encuentro que se gritó como un gol.
Y previo a la definición por penales, su carácter se reflejó de la mejor forma. Lo apartó a Sergio Romero y le dijo que él iba a ser el héroe. Chiquito lo escuchó atentamente y cumplió con creces.
Luego de la victoria, Javier Mascherano se mostró con lágrimas, dándose un abrazo eterno con cada uno de sus compañeros.
Sin lugar a dudas, el «jefecito» es el verdadero líder y referente de la Argentina.
