Última actualización septiembre 1, 2015
La suerte parece ser esquiva para Brasil. Luego de lo acontecido el 27 de noviembre pasado con el derrumbe del Arena Corinthians, el país carioca sigue sumando inconvenientes y razones para los que dudan de la organización para el próximo Mundial 2014. En esta ocasión la gran cantidad de lluvia caída sobre Río de Janeiro provocó la inundación del mítico Estadio Maracaná, generando así gran preocupación en las máximas cumbres de la FIFA.
No sólo se inundó el estadio, sino también los estacionamientos, las salas de prensa y gran parte de toda la infraestructura. Esto generó graves inconvenientes para el acceso a uno de los Estadios que recibirá dos de los partidos más importantes del mundial. Por un lado, el 15 de junio será sede del debut del seleccionado argentino contra Bosnia y el 13 de julio será sede de la tan esperada y ansiada final.
De esta manera nuevamente todos los ojos están posados en los inconvenientes que afronta Brasil a la hora de la organización. Esperemos que esto sólo quede en el recuerdo y que el 12 de junio el Mundial Brasil 2014 empiece en las mejores condiciones posibles.
