Última actualización octubre 4, 2015
La selección Argentina consiguió la tan ansiada clasificación a la final del Mundial Brasil 2014. En un partido parejo, en el cual supo ser superior, venció a Holanda en los penales, teniendo como figura estelar a Sergio Romero. El arquero, pese a las críticas y dudas iniciales, supo demostrar y justificar a lo largo de la competencia su estadía en el arco. En la definición desde los once pasos fue fundamental parando dos y brindándole tranquilidad a sus compañeros. ¿Tuvo un secreto para lograrlo?
El primero de los penales Romero logró atajarlo, desatando la euforia en todo el estadio. En la repetición se vio como el arquero previamente había visto un papel. Allí surgió la duda acerca de si tenía indicado cómo ejecutaba cada pateador.
Luego del partido, y ya más relajado, Chiquito explicó que en el mismo no tenía anotado nada, sino que contenía algo muy especial para él, que le sirvió y le fue fundamental para darle fuerzas y mucha energía.